El acto de unidad

Durante el acto, Francisco Martínez, de Textiles Pigüé y las organizaciones Actra y Gestara, enfatizó en la importancia de los referentes de las empresas recuperadas que supieron llevar adelante estos procesos. También subrayó que cada trabajador sabe que si la empresa para la que trabaja cierra, ponerla a producir es una posibilidad. "La economía cooperativa, autogestiva y popular es también solidaria y feminista", sentenció, y concluyó con un aprendizaje que le dejaron sus compañeros de Pigüé: "El mercado no deberá determinar la suerte de ningún trabajador".

Una economía de la clase trabajadora

Rafael Klejzer, secretario general de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular - seccional Capital, contó a Ansol que después de las PASO habrá una movilización a Plaza de Mayo en las que se mostrará el trabajo de las cooperativas. En ese sentido, argumentó: "El cooperativismo debe ser el primer aliado del Estado a la hora de generar crecimiento económico. La economía de los trabajadores, la economía popular somos los únicos casi que podemos generar riqueza en la Argentina: en el campo, en la ciudad, poniendo en pie cuadrillas de trabajo, cooperativas. Queremos ser los socios del Estado a la hora de la recuperación de la soberanía energética, la recuperación de nuestros mares, de nuestra soberanía alimentaria. Si somos los que generamos los alimentos para que coman nuestros hijos, somos los primeros que no les vamos a poner los agrotóxicos".

También contó que las cooperativas de esta organización creen: "Hay dos tipos de economías: la capitalista y la planificada, socialista. En el medio están diferentes concepciones que se fueron dando como popular, social, solidaria. Nosotros entendemos que somos parte de la misma clase trabajadora". Asimimo, denunció: "La riqueza que generamos es capturada por unos pocos, que la dolarizan generando deduda que después pagamos todos y la mandan a sus casas matrices o cuentas offshore".

Por último, afirmó: "Debemos terminar con la falsa disyuntiva d ela economía solidaria y o la economía popular. Nuestras cooperativas deben estar bien lejos de los ministerios de Desarrollo Social y bien cerca de los de Producción, Trabajo y Economía".

Christian Miño, presidente de la confederación CNCT, dijo a esta Agencia que el país está pasando por un difícil momento económico y político, y contó: "Venimos evaluando con la CTEP -La Dignidad y con varias organizaciones vinculadas con las cooperativas de trabajo y economía social, la única forma de tener un planteo coherente es la unidad".

"La idea es sacar un documento para que después del 10 de diciembre, esperemos que sea con el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Fernández, tengamos una propuesta concreta sobre el cooperativismo de trabajo y la economía social. Nosotros tenemos un rol importante dentro de la economía y fundamentalmente en el consumo interno, que es uno de los factores más paralizados en este momento. Las cooperativas de trabajo es una forma de reactivar la economía" sostuvo y especificó ante ANSOL que uno de los planteos que llevan adelante es el compre cooperativo por parte del Estado, para que tome con prioridad a las cooperativas, por ejemplo, para la construcción de viviendas sociales. También pidió: "Que se lance una ley de cooperativas de trabajo, que no existe en la Argentina y que podamos tener una mejora en impuestos para ser más competitivos".

Un eslabón más de la cadena productiva nacional

Federico Tonarelli, presidente de la federación Facta, que agrupa a cooperativas autogestionadas y empresas recuperadas, explicó: "Era hora de que los cooperativistas de trabajo estuviéramos todos unidos, puliendo propuestas que, nadie mejor que nosotros, el próximo gobierno tome al cooperativismo de trabajo como un eslabón más de la cadena productiva nacional. Nosotros producimos bienes y servicios de primera calidad. Si tanto se discute la necesidad de revalorizar el mercado interno, las cooperativas de trabajo pueden cumplir un rol preciso" concluyó.