Incendios rurales: especialistas del INTA advierten por un verano “difícil”
En grandes áreas no pastoreadas se viene acumulando masa vegetal combustible desde la temporada estival 2016/2017. Hace tres años, en el verano 2016/2017, ardieron más de 110 mil hectáreas en Villarino. Los campos fueron arrasados.
(*) Juan Ignacio SchwerdT (LA NUEVA).- La acumulación de pastizales que tuvo lugar en los últimos tres años y la falta de lluvias constituyen un combo que podría incrementar el riesgo de incendios rurales durante la etapa más crítica del verano.
Así lo indicaron a “La Nueva.” especialistas del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), quienes instaron a productores agropecuarios “a no bajar la guardia hasta febrero de 2020”.
“Por ahora no estamos viendo un gran volumen de vegetación en pastizales y arbustales, porque en algunos lotes hay una alta carga animal, pero sobre la línea del Meridiano V se observa la acumulación de mucha vegetación y eso podría implicar un riesgo”, dijo Alejandro Pezzola, perteneciente al área de Teledetección del INTA Hilario Ascasubi.
A fin de mes el INTA empezará a emitir alertas, cada 15 días, sobre el estado de la vegetación. Será así hasta febrero.
El especialista recordó que los últimos incendios de magnitud se dieron hace tres años -en el verano 2016/2017-, por lo que en las zonas donde no hay pastoreo “se viene acumulando mucho pasto seco”.
“En los arbustales y cordones medanosos donde la hacienda no come se está acumulando material seco y fino desde inicios de 2016. No por nada el problema de los grandes incendios es cíclico, y se repite cada cuatro o cinco años. Por eso, si bien hoy el riesgo es moderado, seguramente en el verano será alto”, advirtió.
Alerta y conciencia
“Pasado septiembre empezaremos a emitir los primeros alertas, pero la recomendación inicial es que los productores tengan en condiciones los cortafuegos. No sólo porque son clave para extinguir incendios, sino porque constituyen un acceso para atacar las llamas o como vía de escape para personas o animales”, anticipó Pezzola.
También recomendó a los productores evitar las quemas de pastizales, por más que a priori se intente hacerlas en forma controlada.
“Y mucho menos basura -aclaró-. También hay que tener cuidado con el uso de máquinas o herramientas que produzcan chispas, y no transitar con vehículos por encima de pastizales”, señaló.
Pezzola opinó que los productores han tomado conciencia, en los últimos años, sobre la necesidad de hacer cortafuegos a una distancia de 10 a 15 metros de los alambrados.
“Se ha entendido que, si bien hacer cortafuegos no es gratis, es mucho más económico que el costo de reponer alambrados o la pérdida de hacienda. Pero no nos podemos relajar”, señaló.
Pezzola dijo que Vialidad está realizando un trabajo “muy a conciencia” de los pastizales de las banquinas y los denominados macizos forestales.
“Les pedimos que quiten todas las ramas que estén a menos de tres metros del suelo y mantengan las banquinas, y la respuesta ha sido muy buena”, destacó el especialista del INTA Hilario Ascasubi.