TRAS 47 AÑOS DE SERVICIO SE JUBILA ELBA HERRERO
La Observadora meteorológica Elba Herrero, realizará desde hoy a las 15 h. hs. su último turno de servicio en la Estación Aero Pigüé, para pasar a gozar de su jubilación después de 47 años desempeñándose en esa función.
Elba relató que en 1972 – cuando se inició como observadora, no se conocían ni los datos del clima ni la estación meteorológica porque no había medios de difusión. “Soy docente y como empecé haciendo suplencias en pre escolar –en dos jardines - en un solo turno. No había mucho trabajo y en el periódico El Argentino, había un llamado para cubrir una vacante en la estación meteorológica local. Me presenté al concurso y quedé seleccionada. La oficina estaba en la casona de la alta torre del parque que en ese entonces era provincial y el campo de observación se ubicaba en el sector que hoy están los talleres municipales. Vi nacer los galpones municipales y la pileta riñón” afirma Elba a la vez que reconoce “empecé al revés porque había que cubrir rápidamente la vacante así que empecé a trabajar. Aprendí a hacer las observaciones con un hombre mayor que estaba a cargo de la estación. Él era oriundo de capital federal y se quería volver a su ciudad. Después me fueron mandando la información por correo para que haga el curso de observadora.”
En cuanto al instrumental que se utiliza para realizar las mediciones, Elba comenta que a pesar del paso del tiempo no se ha tecnificado demasiado la aparatología. “En casi todas las estaciones meteorológicas del país, básicamente se usan termómetros de mercurio o de alcohol y registradores. El instrumental está guardado en una casilla que tiene una ventilación- que es estándar para todas las estaciones – al resguardo de la luz solar porque no pueden estar expuestos” explicó Elba quien también dijo que las observaciones se realizan de lunes a lunes y manera tri-horaria: a las 9, 12, 15, 18 y 21 hs. A la noche queda el registrador que es un aparato que funciona durante las 24 horas, con un instrumental de relojería, con una faja de papel milimetrado que va graficando la temperatura y la humedad. Hoy existen estaciones meteorológicas automáticas, pero no puede reemplazar al observador humano que cumple la función de vigilar durante todo el día los fenómenos climáticos y registrarlos” explicó Elba.
Los datos que se toman en la estación local, se envían vía mail al Servicio Meteorológico Nacional. Al respecto Elba relata que en sus inicios se comunicaban por BLU a la cabecera que estaba en Mar del Plata y después se cambió a Ezeiza, donde llegan los datos a la oficina de pronósticos. Cada departamento del SMN tiene su especialidad: hidrometría, climatología, etc. Nosotros somos el primer eslabón que son los datos que allí se procesan hasta llegar a la central de pronósticos” dijo Elba Herrero quien añadió que la estación de Pigüé data de 1934 y forma parte de la Organización Meteorológica Internacional, lo que permite que los datos de nuestra ciudad estén disponibles en cualquier sitio del mundo donde haya una estación adherida.
Además, Elba detalló que en la estación meteorológica no sólo registra datos, sino que además los observadores los codifican para enviarlos al SMN y confeccionan informes mensuales no para ese organismo sino también para la oficina local.