Mujeres de Pie reconoció a Alicia Arana
La agrupación Mujeres de Pie reconoció a Alicia Arana, la querida vecina vinculada al mundo de las danzas españolas quien estuvo acompañada de su familia y un grupo de amigas y compañeras.
“Alicia Mabel Arana, nació un 20 de junio, hija de Clelia y Felipe, hermana de Juan Carlos, cursó sus estudios en el Instituto Niño Jesús y al terminar magisterio se fue a España, Madrid y País Vasco, a perfeccionar su estudio y vocación como profesora de danzas, en su regreso a Argentina se enamoró de Oscar Monti, se casaron en 1981 y formaron una bella familia con sus hijos Leandro, Marilina y Juan, siendo hoy abuelos de Tomás y Pier, hace cinco años retomó su talento, su vocación, sus prácticas con Pasión Gitana pudiendo demostrarnos que en la vida siempre hay tiempo para lo verdadero y para lo que vibra desde nuestro genuino corazón”, se señaló en una breve reseña de su vida con varios datos que brindó su prima Marisa Arana. Que brindó su prima Marisa Arana según señaló con una sonrisa Leticia Iacovelli principal impulsora de este homenaje.
Después una colega como Alicia Burggi confió “la persona que me dio el puntapié inicial fue Alicia, cuando yo vine a vivir a Pigüé nos unen varias cosas además de la profesión, tenemos hijos discapacitados, entonces compartimos un montón de cosas en la vida, y yo vine con un poco de miedo porque venía de una ciudad grande donde las profesoras de danzas no nos queríamos las unas a las otras, y llegué a Pigüé y encontré una acogida muy cálida, yo no me animaba a arrancar mi carrera y Alicia me invitó a su escuela Uzkadi a dar clases de danza clásica a sus alumnas y en realidad el puntapié inicial de toda mi carrera se lo debo a Alicia”.
Mientras que Liliana Pin de Fischer señaló que había escrito unas palabras porque “la vida nos tiene juntas desde la escuela primaria, secundaria, juventud y toda la vida de adultas”, tras lo cual leyó un hermoso texto donde en la parte culminante señaló “y ahora cuando viene el tiempo de la cosecha y los caminos recorridos obligan a poner en equilibrio la balanza, es el momento de recibir la luz del arco iris, y disfrutar de todos sus colores, dejarse llevar por la brisa tibia del encuentro con la danza flamenca que ofrece muchas oportunidades para agradecer y transmitir lo atesorado y muchas otras para sonreír, ramilletes de amigas, de música, de alegría, todo lo has ganado Ali, siempre fuiste y serás una estrella”.
Finalmente la homenajeada agradeció el reconocimiento que dijo en principio le pareció muy raro “me dio un poco de nervios y después me gustó, hoy a la mañana recibí muy temprano un mensaje de mi hija, y es como que me dio toda la fortaleza para disfrutarlo, y estoy con toda gente muy querida. No he tenido una vida relevante, mi vida ha sido muy simple, trato que cada día sea lo más simple, sí tuve una excelente familia, padres que hoy son muy mayores pero que están muy bien, un hermano que está lejos pero la tecnología acorta las distancias, hijos maravillosos, una hija que me dado los nietos, en representación del otro hijo tenemos a Leandro, que es un poco mi asistente, el que me hace acordar las cosas cuando me olvido y un marido maravilloso que juntos hemos pasado todos los momentos, los muy buenos, los no tan buenos, y algo que es espectacular que es amigas de muchos años, algunas otras de no tantos años, que siempre están como también mencionar a la institución, al Centro de Día porque a mi hijo le encanta ir a esa institución y también es un poco de mi familia”, dijo y que hace unos años retomó las clases de danza con un grupo “que más allá de la actividad de baile, hay otras cosas que surgen, y hay una contención y un acompañamiento que a mí particularmente me ha revitalizado mucho, y saben que las quiero un montón, gracias por esto, algo que voy a atesorar para toda la vida”.