Al igual que varios actores sociales están proporcionando ayuda a las familias que más lo necesitan en el complejo contexto socio económico que genera la pandemia por el COVID-19 y sus consecuencias; la Corriente Clasista Combativa (CCC) de nuestro distrito está trabajando en el acompañamiento de casi 70 familias en Pigüé. Así lo confirmó Anabela Duca quien comentó “Hay gente que ya la venía pasando mal por la falta de trabajo y se acercaba a pedir ayuda a Desarrollo Social Municipal pero hoy nos encontramos con mucha más gente que de todos los sectores que se acerca a buscar mercadería”
La Corrriente Clasista Combativa (CCC) es una organización social que en Pigüé viene trabajando hace cuatro año. Está integrada por alrededor de 58 personas de las cuales 30 cobra un plan social de Nación. “Entre las actividades hacemos talleres de tejido al crochet, manualidades, armamos viandas para adultos mayores, juegos didácticos para abuelos y estuvimos haciendo juguetes para el sector de oncología infantil de Hospital Dr.. José Penna. Es cierto que cobramos un plan social pero nosotros fomentamos la cultura del trabajo” relató Duca.
68 familias
Sobre el trabajo de ayuda social que lleva adelante en Pigüé la CCC, Anabela Duca explicó “Nosotros confeccionamos barbijos solidarios. Entregamos un barbijo por un alimento o el importe de $30 y con lo que recaudamos compramos mercaderías. También desde el partido Justicialista, compran mercadería y a través de la diputada Marisol Merquel y de Hugo Corvatta nos han acercado alimentos en varias oportunidades, para que podamos asistir a algunas familias. Y también recibimos donaciones de la gente, pero del municipio no recibimos. Sí, ayer – y lo agradecemos – Belén Favre, del municipio nos dio papas”.
En cuanto al crecimiento exponencial de las necesidades y el aumento de familias que requieren algún tipo de acompañamiento, Duca señaló “Cuando arrancó la pandemia veníamos atendiendo a 13 familias y ahora estamos acompañando a 68. De estas familias, 24 son abuelos. Siete de ellos son los que ya veníamos asistiendo todas las semanas. Con ellos también hacemos acompañamiento. Nuestro compañero Grillo Shell que hace la entregas. Lo esperan con mate cocido y se queda a charlar con ellos, porque no es solamente llevarle la mercadería sino también escucharlos porque en medio de la pandemia se dificulta el contacto con los seres queridos o familiares y en ese sentido los abuelos también la vienen pasando mal. Por eso además, los fines de semana les llevamos tortas, panes caseros que elaboran las chicas y es un buen momento” sostuvo Duca.
Comité de crisis
Respecto de la forma en que se instrumenta la ayuda social en el contexto de la pandemia por parte de las diferentes organizaciones, Duca expresó “Cuando teníamos el merenderos, había gente que nos traía donaciones y ahora están del otro lado. Ayer me subí a un taxi y el taxista me dijo que están trabajando al 30% de lo normal. Tengo una vecina que no quiere prender nada porque le tengo miedo a la factura del gas” se lamentó la integrante de la CCC.
Asimismo, Anabela Duca coincidió con otros voceros de diferentes organizaciones que brindan acompañamiento y ayuda social al decir “Creemos que dentro de esta pandemia no tiene que haber mezquindades de distintos partidos políticos. Tenemos que trabajar de igual manera pero el municipio aun no integró un comité de crisis que hoy sería fundamental para que dentro de toda la gente estamos ayudando puedan escuchar también las voces de los más necesitados, porque hay gente que antes no necesitaba ayuda y hoy sí la está solicitando, pero por ahí, no quiere ir a desarrollo social o que lo llame una asistente social, pero sí se acerca a una organización social, Cáritas o a nosotros” concluyó Duca, de la CCCC.