Al celebrarse hoy el día del auxiliar de educación, conversamos con dos de los trece trabajadores entre maestranza y cocina de la escuela nº 3, quienes coincidieron en que más allá de la tarea que desempeñan los motiva el contacto diario con los chicos, un poco más restringido obviamente por la pandemia y que es un trabajo que disfrutan mucho.
“Yo empecé hace veintitrés años en la escuela 18 paraje Colonia Nueva como cocinera, y hace once que estoy en Pigüé en la escuela 3, y ahora estoy como portera que es un trabajo más tranquilo, pero las dos áreas son lindas”, contó Ana.
“En mi caso hace once años que estoy en la escuela y para mí fue un cambio importante de lo que estaba haciendo a trabajar acá con tanta cantidad de chicos y no lo cambio por nada”, narró Marcelo quien confió que por una parienta que estaba en el Consejo Escolar le sugirió inscribirse, lo hizo, realizó los cursos correspondientes “y a mí me gusta mucho estar con gente, nunca había estado con chicos, y hoy estoy re contento, quise estudiar de profe de educación física, no se dio y esto no es lo mismo pero me gusta estar integrado”, añade quien es además muy querido por los niños ya que es un popular dj que les alegra los recreos a pura música.
“En la escuela soy multifunción”, dice con una sonrisa, mientras Ana señala que tienen más trato con los chicos por el comedor y que establecen muy lindos vínculos. “A veces hacemos de tía, otras de mamá, o Marcelo de papá o tío” acota.
“La escuela es una gran familia, los docentes y nosotros, y hacemos que este engranaje se mueva a la perfección, y es un trabajo el de auxiliar que a veces no nos toman muy en cuenta y creo que también somos una parte importante de la escuela”, reflexiona finalmente Marcelo,
